Dedícame una mirada
y me harás el hombre
más feliz de toda la tierra.
Mírame con esos ojos
con los que una vez
me miraste sin conocernos.
Dedícame una sonrisa
y harás que mi corazón
lata con más prisa.
Muéstrame tus perlas
las que guardas en tu boca
pues no vivo sin verlas.
Dedícame un verso
y me harás rey del universo
después, regálame un beso.